liga de la lujuria

liga de la lujuria

martes, 27 de septiembre de 2011

¡Tan Sexy!

El lugar era propicio, estábamos en su cómoda y caliente cama; no había nadie en el departamento así que estábamos solos, momento perfecto para empezar a jugar el peligroso juego de la seducción; y entre risas y manos traviesas empezamos desordenar su cama y a propuesta mía fue que terminamos bajo su edredón; y el edredón perfecto para tapar nuestras manos que se divertían dibujando nuestras líneas y nuestras piernas que se enredaban unas con otras y poco a poco estábamos más cerca, haciendo que el calor sea cada vez más fuerte, que las ropas sean un estorbo y haciendo que la necesidad de sentir nuestra piel sea tan fuerte e insoportable.
Y yo lo sentía ahí entre la piernas y mi respiración se aceleraba y mis manos querían arrancarle la ropa pero él me miraba tan suavemente y el tiempo se detiene y tenemos todo el tiempo del mundo, y todo está en cámara lenta; el se mueve despacio, despacito mientras beso sus labios y mis manos se meten bajo su polo; sus manos acarician mis piernas y con las yemas de sus dedos me hace vibrar sin mucho esfuerzo; y baja sus labios a mi cuello siempre moviéndose despacio, despacito; y es tan sexy, mientras besa mi cuello, su respiración sobre mi oreja hace que mi corazón se acelere aun mas; y mis piernas van atrapándolo por la cintura y el sigue moviéndose despacio, despacito; el calor es cada vez mas fuerte pero a ninguno nos interesa; y sus manos se meten bajo mi cintura y levantándome hace escapar de mi un gemido ahogado, y es tan sexy y seguimos en cámara lenta; y empezamos a movernos al mismo ritmo y despacio, despacito vamos ahogando nuestras bocas entre besos, besos apasionados, besos húmedos, besos con lengua; mientras mis manos se pasean por su espalda las suyas acarician mi trasero hasta llegar a mis piernas y volviendo a mi trasero, simples caricias que me hacían vibrar, y es tan sexy; y poco a poco y sin prisa le voy abriendo la camisa y mis manos se distraen con su pecho mientras nos besamos tan lentamente, mis manos van bajando por su pecho hasta su ombligo donde me detengo porque no quiero que todo deje de estar en cámara lenta; y el moviéndose siempre despacio, despacito y besándome sin prisa agarrándome del cuello, empieza a bajar la mano por mi clavícula hasta llegar al centro de mi pecho, y con las yemas de los dedos iba bajando mi polo hasta que mi brasier sea visible, y yo agarrando sus caderas mientras él las mueve despacio, despacito, y es tan sexy; y sus manos empiezan a contornear mis senos, empiezan acariciándolos y después los aprietan solo lo suficiente y siempre moviéndose despacio, despacito, mientras mis piernas ya no saben cómo atraparlo más, mis caderas bailan al mismo ritmo de sus caderas, y es tan sexy; y sus labios bajan por mi cuello y bajan hasta mis pechos y los besa suavemente, sin prisa, sin desesperación, los roza con sus labios mientras sus brazos me atrapan por el dorso y me levanta mientras besa mis pechos y ya no puedo mas  y es tan sexy; y sus labios van bajando y con los dientes termina de bajar mi polo, y yo ya no puedo más, y yo ahí suspendida en el aire en sus brazos mientras él se acerca a mi ombligo y lo moja con sus labios y saca la lengua y, haciendo una línea perfectamente recta, la lleva de mi ombligo al botón de mi jean y yo estoy por estallar, y es tan sexy; y empieza a hacer líneas con esa húmeda lengua por todo mi vientre mientras sus manos luchan silenciosamente con el broche doble de mi brasier y yo estoy a punto de estallar; y sus labios llegan a mis pechos y sus manos logran liberarlos del cruel brasier y los besa, los lame, los muerde y es tan sexy; y ahora su pecho y mi pecho palpitan juntos, pegaditos y sudados por tanto calor que hace bajo ese edredón y sus labios vuelven a los míos y algo en el ha cambiado, su mirada es diferente y sus besos tienen otro sabor, sus manos ya no dan caricias, sus besos ahora son mordidas y mis manos se aventuran en sus pantalones y sus manos intentan arrancarme la piel y yo lo siento en las manos, tan duro y tan grande y el lleva su mano entre mis piernas y siente el calor que de mi sale entonces en un ademan idéntico cada uno va por el botón del otro y casi arrancándolo logramos cruzar esa línea entre el juego y la realidad, los jeans se hacen complicados de sacar por el sudor y la desesperación del momento, pero nunca imposible; y estábamos ahí en ropa interior uno sintiendo al otro, y el ritmo había cambiado, era más rápido , más salvaje,  y nuestras manos apretaban con fuerza el cuerpo del otro hacia uno y ya no podíamos mas, ya no podíamos seguir postergándolo y nuestras manos sin necesidad de instrucciones especificas nos quitaron las únicas prendas que aun llevábamos puestas pero una vez desnudos y tan cerca, no nos apresuramos porque él entre en mi, respiramos un momento y nos miramos llenos de placer y volvimos a la cámara lenta; y el entro lentamente y yo quebraba la espalda al sentir cada centímetro suyo entrando  en mi; y los gemidos y sonidos ahogados salieron sin poder silenciarlos y mientras sus brazos me apretaban contra él y mis brazos se aferraban a su cuello y el se movía despacio, despacito y era tan sexy; y en cámara lenta sudamos uno sobre el otro, moviéndonos despacio, despacito y al mismo ritmo, como perfectos compañeros de baile, como si hubiéramos nacido para este momento y este placer, despacio, despacito; mis piernas lo atrapaban y acercaban aun mas a mí, no dejando que ni un centímetro suyo se quede fuera mío, y el pasaba sus brazos por debajo de mi cintura y me levantaba y era el lugar exacto el que tocaba dentro mío y sin poder evitarlo algo en mi exploto conjuntamente con mis gemidos, gemidos que colaboraban a que él se excite aun mas y también exploto conmigo; los dos con ruidos ahogados y con las bocas secas, completamente mojados y muertos por el calor y cansancio; terminamos abrazados sin querer dejarnos ir; sin prisa ni desesperación nos besamos y reímos…y el era tan sexy!

La Pelicula

El abrió la puerta tan sonriente y me invito a pasar, el saludo de amigos de toda la vida, el beso en la mejilla con el abrazo correspondiente y el disfrazado interés por las cosas que hemos hecho con sus respectivos motivos ocultos.
Y empezamos a escoger la película que íbamos a ver: una romántica? No! Una de acción? No pues! Una de horror? No, no son buenas, Una comedia? Ya, será!
Y con la película en mano y frente a frente, mirándonos a los ojos con una mirada de complicidad única, nos empezamos a besar, y con su genial y animalesco estilo, el me acorralo contra la pared, chocándonos con todos y cada uno de los muebles del departamento; y ya ahí acorralada y dejándome llevar, nos besamos desenfrenadamente, ahí contra la pared, sus manos dibujaban mi cuerpo una y otra vez, y mis manos necesitaban hacer lo mismo, entonces la película cayo al piso y, ahí contra la pared, mis manos sintieron sus perfectos brazos y su ancha espalda, su esculpido abdomen y su apretable trasero; y mientras el mordía mi cuello con canina insistencia, nuestras caderas se movían bajo un ritmo muy circular, ahí contra la pared, mis piernas subieron a su cintura obligándolo a no dejar espacio entre el y yo, mientras que toda su ropa iba cayendo al piso sobre la película, y mi pequeño vestido, como perfecto cómplice, se levantaba, dejando que nuestros desesperados esfuerzos por sentirnos den sus frutos; y ahí contra la pared, y sudando por la calentura y el esfuerzo físico, y con nuestras caderas bailando perfectamente al mismo ritmo y sin que falten los besos apasionados, las uñas en la espalda y las mordidas espontaneas, entre gritos ahogados y gemidos de placer, ahí contra la pared, terminamos exhaustos, y cuando ya todo había terminado nos dejamos caer al piso.
En el piso, recuperando el aliento y algunas prendas, nos  miramos y nos sonreímos con nuestra única complicidad, y El me pregunto: “te gusto la película?” y entre risas le respondí: “estuvo genial! aunque bastante porno no?”

Un NO Contundente

… Yo le dije que NO, no muy contundentemente claro, pero no al fin; mas él no me hizo caso, es más, casi nunca me hacía caso y quizás fue esa rebeldía la que no me permitía decir contundentemente NO. Paso siguiente estaba enredada en sus brazos, sin darme cuenta sus besos apagaron mis nos, sus manos desabrochaban mis botones y su respiración era cada vez más rápida y salvaje; no pude resistir aunque hice el intento, claro que no fue mucha mi resistencia. Y escena siguiente me cargo en sus brazos y atravesando toda la casa, terminamos en su cama; la desesperación era latente,no importaba nada mas, lo único que quería era arrancarle la ropa mientras él besaba cada centímetro de mi piel, y las gotas de sudor empezaron a rodar, por su frente, por su espalda; tan grande y varonil espalda; gotas de sudor que me volvían loca… Y ahí estábamos, éramos uno, ya no había espacio que nos separara, tampoco queríamos separarnos, no queríamos que acabe; solo sentíamos la piel sobra la piel, las uñas, los dientes, los labios y nuestras manos entrelazadas… Y morimos uno dentro del otro, juntos… Y cansados, después de recuperar el aliento, él me abrazaba y me hablaba de otras cosas, cosas que no me interesaban, y jugaba con mi pezón mientras yo le besaba sin apuro y le miraba sin escucharlo y pensando: “NO, no voy a encariñarme con él” y me lo repetía cuantas veces podía, quizás para convencerme a mi misma… inútiles NO contundentes nos…

lunes, 26 de septiembre de 2011

Una tarde de Desestres

Una de las últimas tardes de clases, hacia un trabajo con un amigo,, pasaba el tiempo y el trabajo iba quedando poco a poco mejor, hasta que terminamos y mi amigo se retiró, entonces decidí abrir una web 2.0, exacto, el bendito y fantástico FACEBOOK.

Busque entre mis contactos y un mundo de mujeres en línea se encontraban, empecé a hablar con unas cuantas, y me di con la sorpresa de que una amiga, con la que ya había tenido pequeños roces, se encontraba en línea, “hola”-le dije- respondió inmediatamente diciendo “hey tú, te perdiste”. Una manera un tanto rara de empezar a dialogar, continuamos hablando y pregunte como se encontraba, me respondió que se encontraba “estresada”, respuesta que de inmediato desato una sonrisa en mi rostro y le propuse ayudarla con eso, “te ayudo a desestresarte, ¿qué dices?” Dije yo.

La respuesta se hizo esperar, pensé en recibir un no, pero cuando ésta llego, decía “¡claro!, pero, ¿cómo lo harás?”, empecé a meditar en un lugar para poder citarla y, para mi buena suerte, mi padre salió de su habitación, me dijo que iba a salir por motivos de trabajo, sonreí y le dije que vaya con cuidado, para no levantar sospechas, aunque en realidad me levantaría a la chica.

Inmediatamente mi padre salió de casa, le dije a la chicha que si podría subir, ella accedió; comencé a alistar y preparar todo, en realidad metía mi ropa donde hubiera espacio. Continuaba limpiando el ambiente y se me ocurrió ir al mini depa que se encuentra en el piso superior de mi casa.

Escuche tocar la puerta, salí y ahí estaba ella, con tan solo un cálido beso en la mejilla le dije para ir a la parte superior, ella accedió sin pero alguno. Entramos al mini departamento, empecé por tomarla de la cintura, mientras la conducía hacia la habitación, entramos en ella y comenzamos con las caricias y a envolvernos en besos llenos de pasión, la cargué hasta la cama, le quitaba poco a poco la ropa, ella hacía lo mismo, llegue a descubrirle el pecho y en él me encapriché, empezó a gemir llena de erotismo, poco a poco le quité el pantalón y todo lo que ahí abajo se encuentra, hizo lo mismo conmigo; envueltos y llenos de pasión y erotismo emprendimos juntos el camino de ser uno en cuerpo.

Un fuerte y agudo gemido dio alerta a que el camino había concluido, ambos jadeando de cansancio y con una sonrisa en el rostro nos deteníamos lentamente, hasta quedar completamente quietos.

El silencio invadía la habitación completamente, ambos nos levantamos de la cama y comenzamos a vestirnos, intercambiamos unas cuantas palabras, hasta salir del departamento y, así como llegó se fue, solo que añadió “se repetirá”….

una beneficiosa espera

agradezco a Zuperman por dejarme publicar aqui los relatos de mis momentos de mejor inspiracion...

viernes, 9 de septiembre de 2011

no siempre es tan bueno


Salimos la primera noche, tan solo necesitaba satisfacer mi necesidad, un juego más, una noche como las demás con algo de acción,  y luego despedirnos sin compromisos, sin preocupación. Fue idea suya entrar a una casa abandonada, fue iniciativa suya quitarnos algo de ropa y fue ella quien prohibió que yo siguiera su ejemplo.
No dejaba de hablar, me empezó a idolatrar, decía que todo esto era un sueño, que había añorado estar conmigo desde que me había visto, que le encantaba besar mi pecho y que me había elegido para ser el primero, que era perfecto. Entonces no pude dejar de sentirme incomodo, esto no era normal. No pude mas, la vi a los ojos y ya no era el ratón de biblioteca que había elegido como víctima, ya no era yo quien llevaba la batuta, ella buscaba una relación formal, entonces me detuve.
Le dije que era mejor que nos fuéramos, que era tarde; hizo caso omiso a mis palabras y me desabrocho el pantalón, empezó a tocarme. Me dijo que anhelaba sentirme dentro suyo. Sentía como movía su mano dándome placer pero mi razón decía que debía detenerme, que esto no podría terminar bien; “Cesar está loca, te ha estado observando desde el primer día de clases, es una obsesiva y ¿si es psicópata? Será mejor irnos” mi mente recitaba nerviosa cada una de estas palabras, mi intuición me decía que debía huir.
  • ¡Rayos! – exclame- olvide que necesito un libro para un trabajo que he de presentar mañana, debo ir a buscarlo, lo siento tendremos que dejar esto para mañana. – me apresure a ponerme nuevamente mi camisa, el jersey y la chalina y Salí apresurado de la deshabitada casa en la que estábamos.
Ella caminaba a paso firme tras mis huellas, me ponía cada vez más nervioso, entonces gire sobre mis talones y le dije que la buscaría mañana para continuar nuestro jueguito. Le di un beso en la mejilla y me monte en una combi para alejarme rápido de ella.
Tenía que asistir a clases de contratos pues arriesgaba mucho si faltaba, entre y ella no estaba, sentí alivio, atendí a aquello que decía el docente, ella no estaba, quizá se había arrepentido por lo apresurado de nuestra “confraternización”. De pronto el docente sonríe hacia la puerta y hace un gesto aprobando el ingreso de alguien más, olvide mi agnosticismo y comencé a rezar a cada santo a pesar de haberlos criticado durante tanto tiempo, pero han de estar resentidos conmigo por tanta blasfemia pues allí estaba ella, con una sonrisa de oreja a oreja, me apresure a ponerme los audífonos baratos de mi móvil y a subirle el volumen a la música, mientras ella se acercaba a mi pupitre. Todo andaba tan bien y de pronto era una pesadilla, hubiera preferido soñar con Freddy Krueger antes de tenerla a ella sentada a mi costado.
No dejaba de mirarme, yo trataba de no hacerle caso, pero ella estaba a mi lado acosándome, desnudándome con su mirada lujuriosa, de pronto me paso una nota.
“ayer la pase muy bien, hoy no he dejado de sonreír, es que eres perfecto para mi, cuando hablas, cuando lees, cuando escribes, cuando cantas, cuando caminas siento que de solo verte estoy en un mundo diferente. ¿Que haremos hoy?”
¡Maldición! No podía creer lo que estaba leyendo, entonces pensé: “que rayos, hagámoslo” le devolví la nota diciendo: “será una sorpresa”
Ella me miro y sonrió.
Termino la clase y decidí llevarla a la oficina donde practicaba, habían pasado las 8 pm así que estaba vacía y resolví que si haría esto sería para satisfacer más que una necesidad, así que decidí tener sexo sobre los escritorios, como si fuera mi secretaria, cumpliría una fantasía.
Estábamos besándonos, nuevamente yo no traía  la camisa puesta, ella dejo caer su brasier, yo estaba sentado en el lugar del jefe, ella a un lado del escritorio de rodillas me besaba el pecho, comenzó a bajar, yo estaba siendo complacido, ya no me importaba que sea una loca, estaba a punto de ser muy bien recompensado por hacer que conociera un algo de placer. Estaba tan cerca que creí que me comenzaría a jugar con su lengua sobre mi pene. Pero porque rayos no podía mantener la boca cerrada, antes de empezar con la felación me miro y dijo: “¿no te dirán nada en casa verdad?  Porque en mi casa mi mama sabe que salí contigo y que probablemente llegaría un poco tarde”.
Me incorpore en poco menos de un pestañeo, y le pedí que repitiera lo que acababa de decir, esperaba haber escuchado mal debido a la excitación pero lo dijo una vez más, y me dijo que sí, que seriamos enamorados por lo menos su mama debería saberlo. Yo estaba atónito, casi desnudo parado en medio de la oficina, la mire a los ojos y le dije: “tu y yo no estaremos, y no es por ti, solo que no estoy preparado para una relación” trataba de no ser tan crudo pues en realidad pensaba “¿acaso estás loca? ¿De dónde sacas que quiero una relación? Esto es solo sexo y adiós” pero me daba miedo que se volviera loca y quisiera matarme o matarse. Me vestí y le pedí que hiciera lo mismo.
En la esquina de la Av. Arequipa con la Av. Centenario me dijo que ella tomaría el camino de la derecha sabiendo que yo seguiría de frente, asentí y se puso histérica y me dijo: “¿acaso no puedes aunque sea fingir que te intereso un poco y pedirme que caminemos juntos?”   La mire a los ojos y le dije: “no”. Encendí un cigarrillo y seguí mi camino

lunes, 5 de septiembre de 2011

entre las sabanas y las estrellas


El frio no dejaba que se concentrara en las paginas que estudiaba, se habia sentado a esperarla sobre el muro de un jardin, frente a la pizzeria donde habian concertado encontrarse, como siempre Alejandra tratando de hacer que el se impacientara, mientras el sentado no se preocupaba por nada. Decidio encender un cigarrillo y leer un poco mas, ella llego y decidieron no comer nada en la dichosa pizzeria, tomaron rumbo desconocido y comenzaron a andar.
Se acerco a su oido y le dijo q lo acompañara, el decidio seguirla, siempre era interesante seguirla, entonces ella lo condujo hasta su casa, no tardaron mucho en volver a la calle, decidieron robarle un vino a sus padres y salir nuevamente para beberlo en las calles.
La botella ya estaba casi vacia cuando el giro sobre su cuello y, acariciando su rostro, la beso. El juego de toda la vida con un nuevo ingrediente, lujuria; sus labios eran dulces debido al vino, sus mejillas rosadas, sus ojos cerrados no decian nada, no era necesario dar ninguna respuesta, era momento de seguir el juego hasta el final.
Se fueron caminando por las calles de la fria ciudad, dieron la vuelta en la esquina de la avenida retorno y decidieron adentrarse en un hotel, ambos actuaron con normalidad mientras solicitaban la habitacion, el cuartelero no se inmuto pues esta escena era de lo mas normal para el, en cambio en el rostro de ella se dejo notar un atisbo de nerviosismo.
Tomaron la habitacion 201, el cerro la puerta con la mano izquierda mientras su derecha levantaba a su acompañante, la dejo caer sobre la cama de colchon algo duro, sus besos no eran los tiernos besos de un amante inocente, ella mordia sus labios, el desabrochaba su camisa, ella se quitaba la blusa dejando ver el brasier que resguardaban sus pechos, se detuvieron y acariciaron lentamente el pecho de otro, reconociendo los detalles que hacian unica su contextura, ella lo beso una vez mas, y quito sola al guardian de sus pechos, el besaba su cuello, descendia rozando su clavicula, acariciaba sus pechos y cerraba el ritual con una sorpresiva mordida sobre la punta de sus pezones, lo suficientemente ruda para que ella lo disfrutara.
Se enredaron entre las sabanas del hotel con las cortinas abiertas, a ambos les gustaba hacer el amor mirando las estrellas, creian que juntos podrian acercarse un poco mas al cielo, ella se estremecia cada vez que el la penetraba.  Movieron las caderas al mismo ritmo en sentido contrario, bailaban juntos la misma cancion, seguian los mismos lienamientos pero seguian direcciones contrarias, no era un error, lo hacian concientes de que asi se sentirian mas el uno al otro si el ritmo contrario los hacia colisionar al frente.
El sudor en el cuerpo de ella hacia que el sientiera mas placer, era atractiva cuando sudaba, era atractiva cuando lo miraba, era atractiva siempre ante sus ojos. De pronto ambos sintieron el calor surgir desde su ombligo, danzaron con mas rapidez y ahogando juntos los gritos de placer, alcanzando a oir solo el roce de su piel,una vez mas estaban compartiendo un pedazo del universo, fusionando su serenidad con el descontrol, haciendo que polos opuestos encontraran afinidad. Se miraron al terminar y decidieron pasar esa noche juntos, el sabia que en casa lo regañarian pero no queria cambiar el momento con nada mas.
Desperto y la vio parada frente a el, serena, con el cabello mojado y con la camisa de el puesta. “Debemos irnos” le dijo,  ella asintio y con una sonrisa se dirigio al baño para vestirse, “¿que haces?, no vengas ahora con que te avergonzaras de que te vea?”  regaño el; “es solo que me da miedo dejarte de gustar” dijo ella desde tras de la puerta. “me gustas desde hace mucho y lo sabes, no cambiara nada despues de todo lo que vivimos aunque sea sorprendente nunca haber sido tu enamorado” dijo mientras se incorporaba para ir a buscarla al baño.